dissabte, 4 de maig del 2013

Le Petite Norte

... o "La Venganza del Ave Fénix", debería llamarse esta historia. Una semana más os traigo un relato, en esta ocasión de Rodrigo Serrano Villeguas (@SrtoSerrano), quien ha escrito un texto del cual afirma que es pura ficción y que cualquier parecido con la realidad es pura coincidencia. Leyéndolo, ¡quien lo diría! En fin, estoy seguro que os va a gustar... 

Le Petite Norte

¿Hola sigues ahí?.. Claro que sigues ahí, solo que no eres tu quien lee esto, y aunque lo hicieras no tendrías la suerte de saber que soy yo quien escribe.

Ambos sabíamos que todo empezó como un juego de venganzas, teníamos enemigos comunes “¿Por qué no aprovecharlo?” pensé, claro que cómo iba yo a saber que tu eras el arma que ellos habían preparado para dispararme. En su comienzo todo eran risas y buenos ratos disfrutando de mi solo con hielo y tú de tu té con leche, aún recuerdo la graciosa mueca de tu boca cuando pasábamos por aquellos bares, confidentes de nuestras largas charlas.

Tú eras una persona tímida y parecías un juguete en las manos de aquellos que tanto daño te habían hecho, o al menos eso pensaba yo, sacabas lo mejor de mi no sin guardar un pequeño trozo día tras día hasta que fuiste libre. Qué pena que tú cogieras tanto de mí y que yo me quedara tan vacío por dentro. Pensaba que siempre seríamos cómplices y que jamás dispararías esa bala que ellos cargaron en ti contra mí, pero lo hiciste. Yo me vi como una caricatura de mi mismo, mientras que tú disfrutabas de todo lo aprendido. Solo los grandes caen, lo mío fue más un derrumbamiento, una avalancha que por suerte o por desgracia sepultó las cenizas de aquello que fui. Pero ahora renazco de ellas cual fénix, con el vano propósito arder de nuevo pero esta vez no arderé solo, tú me acompañaras. 

Lo más gracioso de todo es que ni siquiera te lo imaginas cuando me ves en el mismo bar, agarrado a ese solo con hielo, y te ríes pensando que soy patético. Cuando en mis adentros yo rio viendo como tú te dispara con la misma bala que usaste para mí. Hoy esa obra maestra llamada “tú” que tanto me costó crear, se muere en tu interior, dejándote tan vacío como estuve yo. Así que aguanta la respiración y siente como la tierra se mueve una vez más, porque este es el final, hoy yo ardo de nuevo y tu aunque no te lo esperas, arderas conmigo.

Cap comentari:

Publica un comentari a l'entrada

Nota: Només un membre d'aquest blog pot publicar entrades.